La Historia Europea y Los Turcos (51/2014)

Los historiadores europeos que presentaron a los turcos al mundo

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La Historia Europea y Los Turcos (51/2014)

Los europeos mostraron interés por la historia del Imperio otomano, considerado como uno de los tres estados más grandes del mundo, junto con el Imperio romano y el Reino de Gran Bretaña. En el sentido moderno, las primeras obras acerca de la historia otomana fueron escritas por los europeos. Las más conocidas de dichas obras redactadas por los occidentales son las de John William Zinkeisen, Nicolae Jorga y Joseph Freiherr von Hammer-Purgstall. Estos tres historiadores escribieron sus obras en alemán. Zinkeisen vivió entre los años 1803 y 1863, y escribió la historia del Imperio otomano desde su fundación hasta el siglo XIX. Zinkeisen no sabía turco ni los idiomas orientales. Por lo tanto, no pudo beneficiarse de las originales fuentes otomanas, en lugar de ello utilizó las obras traducidas a los idiomas occidentales. Pero usó perfectamente las fuentes bizantinas acerca del Imperio otomano y las fuentes occidentales escritas en latín. No se pudo superar la característica de Zinkeisen de utilizar en gran medida las fuentes occidentales sobre la historia otomana. Y su estudio de siete volúmenes traducido recientemente en turco es considerado hoy en día como una obra indispensable para los investigadores de la historia otomana y los aficionados a la historia.

Otra obra importante sobre la historia otomana, escrita en el Occidente, fue redactada por el jefe de Estado y científico rumano, Nicolae Jorga. Esta obra, que relata la historia otomana desde la fundación del Imperio hasta la Guerra de los Balcanes en el año 1912, es uno de los primeros estudios, que analizó cronológicamente por completo la historia otomana. El autor de esta obra tampoco no pudo utilizar directamente las fuentes diplomáticas, y se benefició de las traducciones. La obra de Jorga fue preciosa por que el autor fue uno de los primeros historiadores, que usó intensivamente los documentos en el Archivo del Estado de Viena.

Pero, el historiador occidental más leído y más conocido sobre la historia otomana tanto en Europa como en Turquía fue Hammer, cuyas fechas de nacimiento y muerte coincidieron con dos sucesos importantes para la historia otomana. Su nacimiento coincidió con el Tratado de Küçük Kaynarca, que se firmó entre el Imperio otomano y los rusos en el año 1774. Y falleció en el año 1856, cuando empezó la Guerra de Crimea. Hammer no escribió lo ocurrido en estos años ya que pensaba que no iba a ser tan objetivo, y mencionó en su estudio de los incidentes desde la fundación del Imperio otomano hasta el Tratado de Küçük Kaynarca de 1774. Hammer comenzó a interesarse por el Imperio otomano cuando se inscribió como estudiante en la Academia Oriental de María Teresa en Viena. Esta escuela había sido fundada para entrenar a diplomáticas para Austria. Hammer cursó una década en esta escuela para ser intérprete. Aprendió allí los idiomas fundamentales de la cultura oriental como árabe, persa y turco. El embajador otomano, Ebubekir Ratıb Efendi, que llegó a Viena cuando Hammer era estudiante, y que visitó su escuela, operó en el relato de algunas pruebas. Hammer se encargó como intérprete en la Embajada de Austria en Estambul tras graduarse de esta escuela. Pero Hammer se conoció como científico más que ser un diplomático durante este cargo suyo. En sus tiempos libres, visitaba los libreros de segunda mano en Estambul, y compraba los manuscritos muy preciosos. La biblioteca, construida por el sultán Abdülhamit I en el barrio de Bahçe Kapı de Estambul era uno de los lugares, donde pasaba más tiempo. Además, tomaba clases para desarrollar su árabe en Estambul. Durante una visita a Egipto, vio los textos de los cuentos de las mil y una noches, y los tradujo al alemán. Hammer, quien se quedó en Estambul a lo largo de siete años, escribió después una obra de dos volúmenes sobre Estambul y los estrechos mediante los datos que consiguió en esta ciudad. Tradujo al inglés el libro de viajes del viajero turco Evliya Çelebi, que no se conocía suficientemente ni en el mundo otomano, y lo presentó a Europa. Además, tradujo al alemán las partes sobre Rumelia y Bosnia de la famosa obra llamada Cihannüma (Geografía Universal) del científico Katip Çelebi. Hammer hizo traducciones no sólo del árabe y turco sino también del persa. Tradujo al alemán el diván (libro de poemas) de Mohamed Shamsaddin Hafez, uno de los importantes poetas del idioma persa. Y esta traducción se leyó por el poeta y hombre de letras alemán Goethe, responsable de la biblioteca de Weimar en aquel período. Goethe, quien se impresionó mucho por el libro de Hafez, escribió su obra llamada “Diván de Oriente y Occidente”, considerada como una de las obras más importantes.

La obra llamada “La historia del Imperio otomano” de diez volúmenes de Hammer se hizo el estudio suyo más conocido. Esta obra, cuya publicación se completó en el año 1835, se tradujo al francés en 1844. Una importante parte del estudio se tradujo al turco en el período otomano al beneficiarse de la traducción francesa. Este estudio conocido brevemente como la Historia de Hammer, se diferenció de las obras de Zinkeisen y Jorga por haber sido escrito completamente basándose en las fuentes orientales en turco, persa y árabe. Casi todas las fuentes utilizadas por Hammer pertenecían al Oriente pero el idioma de su obra era alemán. Los investigadores occidentales, que no sabían los idiomas orientales, y que por lo tanto no podían utilizar las fuentes orientales, aprendieron la historia otomana mayormente de la obra de Hammer, quien contribuyó al conocimiento de la cultura oriental por la cultura occidental a través de sus traducciones no sólo del turco sino también del persa y árabe. Desempeñó un importante papel especialmente en la conversión de los estudios sobre la lengua e historia turcas, considerados en el marco de los estudios orientales en Austria, en una ciencia llamada Turcología. Hammer sabía inglés, francés, griego y latín, junto con turco y árabe. Cuando murió, la piedra sepulcral se construyó diferente del estilo católico a pesar de que era un católico que hablaba alemán ya que se impresionó mucho de la cultura turca. Y su piedra sepulcral se construyó adecuado a las islámicas. En su piedra sepulcral, se escribió “Yusuf Hanner, intérprete de tres idiomas, que se refugió en la misericordia de Hüve’l-baki y Rahman Allah. Hammer pidió que se escribiera Yusuf en lugar de Josef en su piedra sepulcral por que se impresionó mucho por la cultura turca. Además, se escribió en la piedra la expresión “la esperanza de la visita es sólo el rezo / si hoy es a mí, mañana será a ti” que vemos en los cementerios en Estambul. Pero las expresiones en alemán, latín y francés, junto con árabe, persa y turco en su piedra sepulcral demostraban que era un científico perfecto, que logró establecer comunicación entre las culturas oriental y occidental, y que era un investigador multilateral a lo largo de su vida.

 


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