Los Turcos que Dejaron Huella en el Mundo (28/2014)
El halterófilo turco, Naim Süleymanoğlu, conocido como "el hombre que levanta el mundo” y “Hércules de bolsillo”, se corona con el título “halterófilo más joven que bate récord mundial en la historia de halterofilia”
En el programa de esta semana mencionaremos sobre Naim Süleymanoğlu que es uno de los nombres más famosos de la historia del deporte del mundo y que es el mejor halterófilo del mundo según muchos veteranos deportivos.
Naim Süleymanoğlu – o con su antiguo nombre Naum Suleymanov - nació el 23 de enero de 1967 en Bulgaria en una familia turca. Cuando tenía 10 años, comenzó a practicar el deporte de halterofilia. Después de cerca de cinco años, en 1982, se perfiló como campeón con medallas de oro en 52 kilos en el Campeonato Mundial Juvenil de Halterofilia organizado en Brasil. Cuando tenía 16 años, volvió a hacerse el campeón batiendo récord. De esta manera, recibió el título del “halterófilo más joven que bate récord mundial en la historia de halterofilia”.
Süleymanoğlu logró batir un total de 62 récords, entre ellos 13 en jóvenes y 50 en mayores, entre los años 1983 y 1986. Al mismo tiempo, obtuvo campeonatos en 52, 56 y 60 kilos en los Campeonatos Mundiales y Europeos. En los años 1984, 1985 y 1986 fue elegido el “halterófilo del año” en el mundo. Pero, no pudo asistir a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles en 1984 debido a que Bulgaria participó en el boicoteo con la Unión Soviética. Además, tampoco participó en el Campeonato Mundial de Halterofilia organizado en Melbourne, Australia, en 1986 a fin de escapar de las presiones de Bulgaria. Pero, se refugió en la Embajada turca el 11 de diciembre. Y pidió que viviera en Turquía y participase en las luchas bajo el techo de la selección turca. Después de que se reconociera su demanda, Naum Suleymanov convirtió su nombre en turco como Naim Süleymanoğlu.
Naim Süleymanoğlu, que tiene un lugar peculiar en la historia de halterofilia en el mundo y que se conoce con los apodos “el hombre que levanta el mundo” y “Hércules de bolsillo”, había alcanzado muchos récords mundiales hasta el año 1988. Son como siguiente algunos de sus récords:
56 kilos en total 300 kilos (1984), 60 kilos en arrancada 150 kilos (1988), 60 kilos en dos tiempos 188 kilos (1986), 60 kilos en total 335 kilos (1986), 56 kilos en dos tiempos 170,5 kilos (1984), 56 kilos en total 300 kilos (1984), 60 kilos en arrancada 148 kilos (1986), 60 kilos en total 335 kilos (1986), 60 kilos en dos tiempos 190 kilos (1988), 60 kilos en arrancada 152,5 kilos (1989). Naim Süleymanoğlu siguió dichos éxitos en los Campeonatos Mundiales y Europeos de Halterofilia organizados en Atenas en 1989. Y cosechó seis medallas de oro en 60 kilos en arrancada (145 kilos), en dos tiempos (172,5 kilos) y en total 317,5 kilos.
A pesar de que Süleymanoğlu declaró que dejó de practicar la halterofilia por la lesión en su cintura, luego anunció participar en los Juegos del Mediterráneo en 1991. En el Campeonato Europeo de Halterofilia en 1992 se coronó con una medalla de oro y dos medallas de plata. En 1992 en los Juegos Olímpicos de Barcelona se alzó a la medalla de oro levantando en 60 kilos 142,5 kilos en arrancada, 177,5 kilos en dos tiempos y en total 320 kilos. En 1996 los Juegos Olímpicos de Seúl ganó tres medallas de oro más, y así se convirtió en el único halterófilo que gana el campeonato mundial por tres veces sucesivamente.
Naim Süleymanoğlu tiene una vida interesante no sólo con sus éxitos en el deporte sino también por el aspecto de vida y el proceso de perfección. Süleymanoğlu es un hijo de una familia pobre. Fue un miembro de una comunidad a que fue tratada como ciudadano de segunda clase bajo presión. Su padre estaba de viaje a menudo por haber trabajado como conductor de autobús. Naim conoció con el peso y la barra de halterofilia entre los deportistas gigantescos cuando tenía 10 años en el Centro de Entrenamiento de Halterofilia de Kıcaali. Süleymanoğlu cuya única meta fue tener éxito y mantenerse la vida logró entusiasmar a los deportistas y espectadores en los concursos internacionales a los que acudió cuando tenía 14 años de edad.
Naim Süleymanoğlu desconoció que se seguía cuando transmitió con una carta a la Embajada turca en Sofía su petición de vivir en Turquía. Pero en cualquier cosa, como resultado, logró seguir sus éxitos y batir muchos récords llegando a Turquía. Naim Süleymanoğlu, que dejó de practicar la halterofilia después de los Juegos Olímpicos de Sídney en 2000, ejercía por un tiempo la presidencia de la Federación Mundial de Halterofilia. Pero, el halterófilo, que vivió desacuerdos con los dirigentes, presentó su dimisión. Naim Süleymanoğlu, que hoy tiene 47 años y mantiene su vida con actividades no deportivas, sigue siendo ejemplo a los futuros Naim con sus éxitos y su cuento de vida.
