Greco-chipriotas distorsionan la reunión entre Akıncı y Anastasiadis

Turquía declaró que la negociación realizada entre el presidente de la República Turca del Norte de Chipre, Mustafa Akıncı, y el líder greco-chipriota, Nikos Anastasiadis, ante la invitación del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, y la siguiente declaración al respecto se han distorsionado por la parte greco-chipriota y destacó que eso pone de manifiesto la insinceridad de la parte greco-chipriota y su falta de voluntad para encontrar soluciones a la cuestión chipriota.

En un comunicado, el Ministerio de Exteriores anunció que Turquía está dispuesta a la reunificación de la Conferencia Internacional sobre Chipre celebrada el 12 de enero de 2017 en Ginebra y que mantiene su determinación en encontrar una solución justa y permanente a la cuestión chipriota.

En este marco, la declaración de Guterres y Anastasiadis tras su cita el 4 de junio en Nueva York fue calificada como un paso dado para finalizar el proceso. Igual que Akıncı subrayó a su regreso a la isla chipriota, Guterres reflejó la idea de que se necesita la reunificación de la Conferencia sobre Chipre dentro del mes de junio sin cualquier precondición.

En realidad, la declaración del secretario general, atribuyéndose directamente a la Declaración Conjunta de Líderes del 11 de febrero de 2014, recalcó que se negociarán todos los temas relacionados, además indicó que no se considerará llegar a un acuerdo en cualquier tema sin coincidir en todos los asuntos.

La parte greco-chipriota, al distorsionar este contenido de esta declaración que transmitió el acuerdo llegado en las negociaciones con el secretario general de la ONU favoreciendo las expectaciones de la política interna de la parte greco-chipriota, incrementó las preguntas sobre la voluntad de la parte greco-chipriota por la construcción de una nueva asociación basada en la igualdad política con la parte turco-chipriota.

Si se pretende en la conferencia sobre Chipre que el proceso de negociaciones, que se mantuvieron desde hace más de dos años en la isla, aprovechándose de esta última oportunidad para la creación de una solución permanente en Chipre, todos los participantes deben adoptar una actitud constructiva que reflejen la voluntad de solución sincera.