La política occidental convirtió al Mediterráneo en cementerio

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ofreció declaraciones a la cadena televisiva estadounidense CNN.

Erdogan criticó a los países europeos por su política de inmigrantes y de Siria.

Subrayó que el Occidente, que queda de brazos cruzados sobre Siria desde el principio, es el responsable por la actual situación.

Precisó que el dictador Bashar Al Asad todavía gobierna a Siria, y criticó que el Occidente no intervenga en Siria.

Recordó que el Gobierno sirio apoya a la banda terrorista DAESH, y destacó que Irán y Rusia otorgan ayuda financiera y de armamento a Asad.

Comunicó que Turquía lucha tanto contra el DAESH como contra el PKK en la región.

Aparte, enfatizó que el PKK perpetra actos terroristas en Turquía, y recalcó que la amenaza principal es la banda terrorista PKK. “Naturalmente, se da prioridad a la amenaza en el interior y sus ramas” aseguró.

Destacó que los estados europeos respaldan a los miembros de la banda terroristas desde hace años y permiten que sus cabecillas se refugien en sus países.

El gobernante, al ser preguntado por el reportero de CNN sobre la migración fugitiva, acentuó que el Mediterráneo se convirtió en un cementerio debido a las políticas erróneas del Occidente.

Turquía acoge como huéspedes a las personas en las fronteras de Turquía, y el número de los que llegaron de Siria e Irak superó 2 millones, agregó.