Grandes desafíos contra Türkiye en 2023

Türkiye está siguiendo su lucha para convertirse en un gran estado en una geografía muy difícil. Es como un anillo de fuego, por una parte,  la guerra ruso-ucraniana en curso, la guerra civil en Siria y la destrucción de la autoridad estatal, por otra parte, el terrorismo y los refugiados hacen que sean más desafiantes. Mientras no fue fundada la estabilidad en Irak, los sucesos sociales, las manifestaciones y los enfrentamientos continúan en Irán. Las tensiones en el Cáucaso, la guerra de Karabaj y los problemas con Grecia. En 2022, para Türkiye hubo grandes desafíos, podrían manejarse a gran escala, ahora el año 2023 está por delante. Otra vez hay grandes amenazas pero al mismo tiempo oportunidades.

La geografía es la fatalidad. El destino de Türkiye es que se encuentra en una geografía que se entrelaza con el Oriente Medio en la intersección de Europa y Asia en una geografía muy difícil. Un área que se puede denominar el corazón del mundo, el centro de los recursos energéticos globales y también un puente entre Europa y Asia. Evidentemente, esta geografía es también el centro de una lucha de poder global, una geografía donde las grandes fuerzas están librando guerras de poder con potencias regionales y actores no estatales. Sobre todo después de los ataques del 11 de septiembre, con las invasiones estadounidenses de Afganistán e Irak, la dinámica de la región se trastornó totalmente. El efecto de la Primavera Árabe todavía se siente, estamos hablando de un estanque de inestabilidad donde surgieron y se alimentaron organizaciones terroristas como DAESH y PKK. Mientras Türkiye lucha con todas estas variables, ahora tiene que hacer frente a los efectos geopolíticos creados por la guerra ruso-ucraniana.

Sí, el primer asunto determinante para 2023 seguirá siendo ciertamente la guerra ruso-ucraniana. La guerra parece ser prolongada y el impacto que tendrá será enorme. Mientras las reducciones basadas ​​en las sanciones impuestas a Rusia seguirán en el suministro mundial de energía, hay un panorama similar en los alimentos y algunos otros productos básicos. Con la llegada de los meses de invierno, también se puede esperar una escalada en la guerra y ciertamente, esto afectará muchas áreas y equilibrios de poder desde el Cáucaso hasta Asia Central y Medio Oriente. Mencionamos de un proceso que abarca grandes oportunidades y amenazas para Türkiye. En última instancia, mantendrá su posición, que se expresa como la Tercera Vía, en 2023, pero también está claro que estará sujeto a más presión sobre las sanciones,  de sus equivalentes occidentales. No obstante, al mantener su posición de equilibrio entre Ucrania y Rusia, Türkiye seguirá manteniéndose en una posición clave, en particular en términos de suministro mundial de energía y alimentos. Una vez más, será posible que Rusia realice movimientos importantes en sus geografías cercanas, donde provocará un vacío de poder. El problema de Karabaj, el corredor de Zangezur, la conexión de gas turcomano a Türkiye  mediante el Caspio, los posibles pasos a tomar contra el PKK/YPG en Siria se nos presentan como algunos de los posibles problemas.

Desde luego, para Türkiye, además de la guerra ruso-ucraniana, también existen desafíos basados ​​en Siria e Irak. La integridad territorial de estos dos países es muy importante para Türkiye. Puede que sea posible iniciar conversaciones en un formato tripartito entre Türkiye, Rusia y el régimen de Assad, pero parece que el régimen todavía no está dispuesto a cumplir con las demandas de Türkiye. Por esta razón, es muy posible que Türkiye tenga que seguir con las operaciones militares unilaterales. En Irak, 2023 también es muy incierto, la creciente influencia de Irán y el creciente nacionalismo iraquí tienen el potencial de conflicto.Otra vez, el PKK/YPG está intentando de aprovechar la inestabilidad en ambos países. En este marco, la lucha contra el terrorismo será uno de los puntos más importantes de la agenda a lo largo de 2023.

Para Türkiye, 2023 será un año en el que el proceso de normalización en Oriente Medio, que empezó en 2022, se fortalecerá aún más. El proceso que comenzó y continúa con los Emiratos Árabes Unidos, Israel y Arabia Saudita continuará con Egipto. Todos los actores relevantes en el Oriente Medio desean salir de la espiral de perder-perder, lo que crea grandes oportunidades para Türkiye.