Hatay, entre el Mediterráneo y el Oriente Medio

La ciudad Hatay, que fue anexada a Turquía por un referéndum realizado en 1939, habiendo pasado por un período de gobierno independiente como República de Hatay.

Hatay se sitúa en el sur de Turquía en la costa del Mediterráneo. El río Así o el río Orontes, que nace en Líbano, atraviesa Siria y que fluye hacia el oeste por el sureste de Turquía, en la provincia de Hatay hasta desembocar en el mar Mediterráneo, ha ofrecido prosperidad y abundancia a la región a lo largo de la historia. La región de Hatay cuenta con obras pertenecientes a muchas civilizaciones. Después de Estambul, encabeza los lugares en donde es muy abundante la riqueza cultural, religiosa y étnica en Turquía. El adhan (llamada islámica a la oración) mezcla con las oraciones de la iglesia y la sinagoga. Hatay se considera como la ciudad de paz por la UNESCO. Y Hatay sigue siendo un ejemplo espectacular a la convivencia de diversas culturales dentro de la paz y prosperidad.

Antakya (Antioquía), el centro de la provincia de Hatay, presenció a muchos sucesos importantes a lo largo de la historia. Alejandro Magno conquistó Mesopotamia y Egipto con la batalla de Issos que la hizo en Antakya contra los persas. Luego, Antakya obtuvo riquezas extraordinarias con el desarrollo del comercio por su posición sobre la ruta comercial importante que aseguró el paso a Mesopotamia, Palestina y Siria. San Pedro, uno de los discípulos quienes se extendieron al mundo desde Jerusalén en los primeros años del cristianismo, fundó en Antakya la primera iglesia rupestre. Los creyentes de Jesús en el mundo utilizaron por primera vez el nombre de cristiano en esa iglesia. La iglesia de San Pedro todavía sigue siendo un centro de peregrinación para el mundo cristiano. La sura Ya-sín en el Corán también menciona de Antakya. 

Juan y Jonás, discípulos de Jesús, llegaron a Antakya y comenzaron a propagar la creencia de Allah. El pueblo de Antakya no les creó a los discípulos. Solamente Habibi Neccar les creó. Neccar dijo que ofrecieron muchos regalos a los dioses romanos para recuperarse. Neccar se recuperó con las oraciones de los mensajeros. Y comenzó a creerlos. El Corán transmite que Allah envía dos mensajeros a los pobladores de Antakya para creer a su religión, pero que los pobladores no les creen y amenazan con matarles. Habibi Neccar dijo que se deben creer al llamado de los mensajeros para Allah. Y los pobladores de Antakya martirizaron a Neccar en lugar de los mensajeros. Neccar se convirtió en el primer mártir del cristianismo que fue la religión hasta el islam. En la sura Ya-sín del Corán se menciona que los paganos, que viven en Antakya y que rechazan la orden religiosa, se matan con Sayha (una onda de sonido muy fuerte). Luego, los discípulos Juan y Jonás se enterraron justo al lado de Habibi Neccar. Cuando los árabes conquistaron Antakya en 636, allí se construyó la mezquita de Habibi Neccar, la mezquita más antigua de Anatolia. Los discípulos, cuyas tumbas se encuentran en el jardín de esta mezquita, son los personajes sagrados tanto por los cristianos como por los musulmanes.

Hatay y alrededor de Siria entraron bajo el dominio francés después de que el Imperio Otomano se derrotara en la Primera Guerra Mundial. Con el Tratado de Ankara firmado entre el Gobierno de Ankara y Francia en 1921, la región de Iskenderun (Alejandreta) en donde vive la población musulmana más densa en Hatay se aisló del general de Siria. En 1936 cuando Francia se retiró de Siria y Líbano, Hatay estaba a punto de pasar bajo el dominio sirio. Atatürk, quien se molestó mucho por la situación de Iskenderun, la intervino diciendo que “una patria de 40 siglos no puede concederse a las manos extranjeras”. En la nota enviada a Francia en 1936 se pidió que también Hatay se convirtiera en un estado independiente como Siria. Se fundó la República Turca de Hatay en 1938 tras las negociaciones largas. Y luego, en 1939, este estado independiente tomó la decisión de unirse con Turquía.

Hatay cuenta con riquezas culturales innumerables. Harbiye, con su nombre antiguo Daphne, donde se encontraron las villas de aquel entonces ricos en el período romano, es un importante centro de asentamiento que ve el río Asi y el Mediterráneo. En las excavaciones en Harbiye se sacaron a la luz los ejemplos de mosaicos más ricos del mundo. Estos mosaicos ahora se exhiben en el Museo Arqueológico de Antakya. El museo arqueológico, que se hace más rico con las obras descubiertas en las nuevas excavaciones atrae a los visitantes de cuatro esquinas del mundo.

Hatay y Antakya también se destacan con su cocina que mezcla los maravillosos ejemplos de diversas culturales. Kenafeh (künefe), que es un pastel de queso empapado en jarabe a base de azúcar dulce, es uno de los más importantes postres de Turquía. Especialmente en los meses de verano las tiendas de künefe están abiertas durante 24 horas.

Hatay y Antakya son una parada que deberían ser de obligado cumplimiento para todo aquél que viaja a Turquía.