Duygu Yılmaz: la investigadora turca que crea bioplásticos con pepitas de aceitunas desechadas

La ingeniera de alimentos Duygu Yılmaz realizó un estudio, que es una primicia en el mundo, para reducir el daño de los plásticos arrojados a la naturaleza, produciendo bioplásticos a partir de semillas de olivo.

La idea surgió cuando Yılmaz se preocupó por el peculiar hábito alimenticio de su padre de comer huesos de oliva para calmar su estómago en los desayunos. Como ella pensaba que las fosas podrían dañar su salud estomacal, decidió llevar a cabo una investigación para determinar si las semillas de oliva eran perjudiciales para su salud.

En consecuencia de sus estudios, descubrió algunas similitudes sorprendentes entre la composición química de los huesos de olivo y el plástico biodegradable.

Este hallazgo se convirtió en Biolive, una empresa que transforma los huesos desechados de olivo en productos bioplásticos.

Se pretende que los bioplásticos sean alternativas ecológicas

Los bioplásticos ecológicos producidos por Biolive a partir de semillas de olivo se utilizan como materia prima en numerosas áreas como la fabricación de paneles interiores de automoción, eléctrico-electrónico, embalaje de alimentación, juguetes, chupetes para bebés y textiles.

A cambio de los plásticos existentes producidos a partir del petróleo y sus derivados, la materia prima con bioplástico producido a partir de la semilla de olivo se descompone completamente en la naturaleza.

Yılmaz figura entre los 10 jóvenes más exitosos del mundo. La científica turca ha recibido más de 30 premios dentro y fuera del país en reconocimiento de sus estudios.

Al hablar de su estudio, explicó: "Los plásticos existentes comienzan a descomponerse en 450 años, esta duración cambia según su especie. Nuestro producto, el hueso de aceituna, se trata de un material que se puede descomponer en la naturaleza cien por ciento en 1 año mezclando la tierra como fertilizante, pero deseamos entrar en todos los sectores donde el plástico está presente".

Yılmaz tiene como objetivo de transformar los bioplásitocos en alternativas ecológicas biodegradables. Sus estudios continuarán en la fábrica establecida en septiembre en el distrito de Tuzla donde se realizará una producción de 500 toneladas mensuales.

Mientras que los recursos petroleros van disminuyendo y los plásticos derivados del petróleo continúan afectando negativamente la salud humana y ambiental. Los estudios muestran que el 50 por ciento de las criaturas marinas tienen desechos plásticos dentro de sus cuerpos. Quienes consumen estos productos también están expuestos a los daños de los materiales plásticos. Los resultados de investigaciones apuntan a la importancia de las materias primas alternativas mostrando que los plásticos existentes se descomponen en la naturaleza durante al menos 450 años.

Los bioplásticos constituirán el 40 por ciento del mercado de plásticos para 2030

Los plásticos producidos a partir del petróleo y sus derivados comenzaron a ser reemplazados por bioplásticos. Los bioplásticos y los plásticos con bioplásticos añadidos han creado un mercado de 30.000 millones de dólares. Como resultado de esta velocidad de aumento, se prevé que el 40 por ciento del mercado de plásticos constituirá el mercado de bioplásticos en 2030.

Biolive, la iniciativa de Yılmaz, que ha pasado a la fase de producción y venta desde el proceso de Investigación y Desarrollo (I+D) en el Tecnoparque de la Universidad Técnica de Estambul atrajo la atención de los inversores en poco tiempo por su producción de aditivos granulados bioplásticos. Biolive, que continúa sus actividades con la inversión por valor de 30 millones de dólares, produce gránulos que son mucho más fuertes y más resistentes al calor en comparación con sus competidores extranjeros.

El objetivo es alcanzar al menos el 30 por ciento del mercado de bioplásticos de Europa y EEUU

La socia fundadora de Biolive explicó que han creado un producto innovador que se utiliza por primera vez en el mundo tanto con semillas de oliva como con residuos de aceite de oliva y expresa:

"Con nuestro producto, recibimos una capacitación sobre emprendimiento en el Valle Silicio y ganamos el concurso de emprendimiento organizado por el Tecnoparque Yıldız y la Universidad Técnica de Yıldız en la categoría Start-up. Nuestro mayor objetivo es alcanzar al menos el 30 por ciento del mercado de bioplásticos europeo y estadounidense en 2 años. Además, hemos sido galardonados con muchos premios y capacitaciones en la plataforma internacional hasta ahora".

Yılmaz explicó que hacen exportaciones a Alemania, China e Inglaterra gracias a sus conexiones internacionales y agregó:

Llevamos a cabo negociaciones para firmar acuerdos que crearán nuevos canales de ventas en Europa. Representamos nuestro país en el campo de tecnología internacional de ambiente limpio en Los Ángeles en 2018 y ganamos el "Premio internacional de materiales avanzados (para el beneficio de los desechos en el Concurso de Ideas Globales del Acelerador Nacional Cleantech). Nuestro producto se emitió en muchos canales de EEUU y Europa, y atrajo mucha atención".  

Continuando con sus inversiones para aumentar 4 veces su volumen de producción, Biolive planea aumentar su capacidad de producción 5 veces en 2 años. La empresa continúa sus actividades en el marco de esta estrategia haciendo inversión en los estudios de Investigación y Desarrollo.