Cataluña y Madrid, las más afectadas por fraude tecnológico

Los fraudes más frecuentes, un 26 % de los que se consuman, son los de identidad -especialmente "online", debido a la facilidad de uso de los dispositivos tecnológicos y las nuevas estrategias en los ciberataques

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Cataluña y Madrid, las más afectadas por fraude tecnológico

Madrid, 29 oct (EFE).- La Comunidad Valenciana (con un 26 %), Cataluña (24 %) y la Comunidad de Madrid (21 %) son las tres regiones españolas que soportan mayor número de delitos tecnológicos según los datos de la Asociación Española de Empresas contra el Fraude (AEECF).

La movilidad y una mayor penetración tecnológica entre los ciudadanos son las principales razones de que sean las comunidades autónomas, de acuerdo con la información facilitada durante la jornada "Claves para innovar e impulsar la prevención del fraude en el mundo digital" que se ha desarrollado hoy en Madrid y donde han debatido expertos en "Big Data" e internet.

Los fraudes más frecuentes, un 26 % de los que se consuman, son los de identidad -especialmente "online", debido a la facilidad de uso de los dispositivos tecnológicos y las nuevas estrategias en los ciberataques-. En ellos, el estafador se hace pasar por otra persona con el objetivo de conseguir un beneficio generalmente económico pero también político o propagandístico.

Por ello, los expertos de esta organización han urgido a reforzar la protección legal de los datos personales y a apostar por los nuevos sistemas de control tecnológico para evitar o reducir las infracciones.

El experto en fraude de esta organización, Alex Triantafyllou, ha advertido a Efe de que internet "no se creó para ser un espacio seguro sino como un sistema para intercambiar información", lo que obliga a procurar "un equilibrio" entre el control exigido por las compañías mediante la solicitud de códigos de verificación y las medidas preventivas que necesita adoptar el usuario.

El segundo delito más común a través de internet es el cometido en el comercio electrónico cuando se produce el intercambio de datos personales o la creación de cuentas bancarias.

En todo caso, el punto débil en la red "sigue siendo el usuario", según insiste Triantafyllou, quien recomienda "precaución ante la compra 'online' de productos o servicios que pueden ser incluso ficticios, porque existe una gran actividad de negocio fraudulento".

Este experto propone mantener especial alerta ante actividades inusuales que surjan mientras el usuario está adquiriendo sus artículos debido a que pueden peligrar sus datos personales.

Respecto a las redes sociales y la privacidad, Triantafyllou apunta que muchos usuarios publican "demasiada" información personal que facilita posteriores ciberataques.

Una de las soluciones propuestas durante la sesión se basa en el uso del sistema Hunter, que permite prevenir las infracciones en el proceso de admisión de operaciones al analizar y detectar solicitudes "potencialmente fraudulentas". EFE


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