Agenda de Turquía y del Mundo (44/2015)

La región de Oriente Medio está inmersa en un profundo proceso de caos y anarquía en los recientes años. Sin embargo, es muy difícil concretar la fecha del inicio de este proceso es que es una cuestión polémica el suceso desencadenante y la fecha del ambiente de caos y anarquía. Quizás hace falta mirar hacia el pasado próximo para ver los ejemplos de colapso tras la Primavera Árabe 2011. Incluso en este caso, es inevitable ir más allá preguntando por qué empezó y terminó la Primavera Árabe. Según una opinión, el punto de partida son las ocupaciones de Irak en Kuwait en 1990 y las posteriores invasiones de EEUU en Irak en 2003. Según otro punto de vista, la Primavera Árabe 2011 estalló debido a la revolución de Irán 1979 y la posterior guerra iraní-iraquí de ocho años. De acuerdo con una idea más comprensiva, el proceso de caos en el Oriente Medio se debió a la disolución del Imperio Otomano tras la Primera Guerra Mundial 1914-1918 y la posterior estructura desfavorable.

En reliadad, el caos de hoy en el Oriente Medio se basa principalmente en que la región de Oriente Medio se formó según los intereses de los países occidentales hace 100 años. El Oriente Medio es un resultado de los estados, límites y políticos creados bajo el control de los países occidentales. Los actores cosmopolitanos y heterogéneos de la región fueron tomados bajo el control de los estados autoritarios. Los dictatores y las ideologías intentaron homogenizar las sociedades con el fin de crear nuevas naciones. En este sentido, trataron de transformar y hacer mismos los grupos étnicos, racistos, ideológicos y religiosos de distintas características según la ideología estatal.

Los dictatores pretendían establecer un orden aplicando métodos opresivos en la política interior y por otro lado desarrollaron colaboración y alianza con los actores internacionales a favor de elllos en la política exterior. El sistema de estados creados de esta manera cambió parcialmente en el período de Guerra Civil, pero no hubo un cambio en su origen. El proceso fue desarrollado bajo las influencias de los dictotores y las grandes fuerzas internacionales que están a su favor. Los pueblos, los grupos no gubernamentales y los sujetos quedaron desactivados o no pudieron jugar un papel definitivo. Claro que eso no significaba que nunca había la comunidad civil. Al contrario, había movimientos públicos fuertes y comunes en toda la región durante el siglo XX. Por ejemplo, siempre existen los movimientos islámicos como Hermanos Musulmanes, los partidos y grupos opositores izquierdistas y liberales. Si bien, esta oposición no tomó parte en la política, por lo que no tuvo influcencia sobre el estado. Hay varias razones de esta situación. He aquí las más importantes: la oposición quedó incapaz de ser suficientemente bien organizada y fuerte, y además no pudo protegerse de las presiones nacionales o internacionales.

Esta geopolítica del Oriente Medio ya llegó a su fin. El término de la Guerra Civil, la oleada de globalización y la Primavera Árabe sacudieron radicalmente el statu quo en la región y colapsó el orden del siglo XX. Eso significa que el orden y la estructura establecida en el siglo XX fracasaron en alcanzar su objetivo. Los adelantos ocurridos en Irak, Líbano, Palestina, Egipto, Libia, Yemen y Siria son la prueba obvia de este fracaso. Es posible pensar incluir a estos países Turquía, Irán y Arabia Saudita. Pero, estos países son más positivos y tienen más ventajas en comparación con los anteriores por sus características peculiares. Por poner un ejemplo, la fuerte histórica experiencia y ventajas de Turquía e Irán, y el respaldo de Arabia Saudita de EEUU y las coyunturas internacionales hacen estos países relativamente más ventajosos que otros países. El estado en estos países todavía mantiene de manera fuerte.

Sin embargo, esta ventaja no significa que estos países no se afecten por la intestabilidad y transformación de otros países. Por ejemplo, el caos en Irak, Líbano y Siria afectan profundamentes estos países. Todos los adelantos en la región absorben estos países. No importa la razón, Turquía, Irán y Arabia Saudita figuran en el centro del Oriente Medio de hoy en día. Por ejemplo, Siria es el ejemplo típico y actual.

La principal agenda se centra ahora en la formación y el desarrollo de nuevos balances en el Oriente Medio. El Oriente Medio se reconstruye, se describe y se forma como a los principios del siglo XX. No obstante, este nuevo proceso se está desarrollando según los criterios, condiciones y estándares a diferencia de los del siglo XX. He aquí son los más importantes:

El Oriente Medio de hoy se forma en el sistema global. En lugar de Reino Unido y Francia, las potencias globales como EEUU, Rusia y China sobresalen más en la plataforma internacional. Estos actores no actúan en solitario, pero colaboran o compiten con otros actores globales y regionales.

Las dinámicas sociales destacan más que los estados autoritarios como en el siglo XX: las rebeliones sociales en la Primavera Árabe, las alianzas étnicas y racistas en Irak, Siria y Líbano, las organizaciones terroristas como DAESH, Al Qaeda y PKK, o los movimiento democráticos civiles como en Turquía…Todos estos actores heterogéneos provocaron el caos de hoy.

Se necesitan los tipos y regímenes de gobierno democrático. Todavía está incierta la forma de creación de estos regímenes. Pero, hay un punto preciso que los regímenes basados en el modelo autoritario nación-estado como en los siglos XIX y XX ya no estarán válidos. Al contrario, se requieren mecanismos y entendimientos comprensivos que permiten la convivencia de los grupos diferentes. Es inevitable establecer los valores y las instituciones que mantengan unidos todos los grupos. Estos valores e instituciones, además de los principios de democracia y libertad, deben contener los principios culturales y religiosos. En resumen, hace falta producir nuevos modelos para que el Oriente Medio del siglo XXI salve del ambiente caos.

Por Ramazan Gözen, de la Universidad de Mármara en Estambul