Reporte de la ONU revela que Afganistán llegó a cifras récord de muertes en 2018

La ONU dijo este domingo que ha documentado cerca de 11.000 víctimas civiles en todo Afganistán en 2018, la cifra más alta en la nación devastada por la guerra.

Un total de 10.993 víctimas civiles, incluidos 3.804 muertos y 7.189 heridos, fueron denunciados en el país en 2018, según el informe publicado por la Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (Unama) y la Oficina de Derechos Humanos de la ONU.

Entre los muertos había 927 niños, el número más alto registrado de niños y niñas muertos en conflictos durante un solo año.

La cifra representó un aumento del 5% en el número total de víctimas civiles y un 11% más en las muertes de civiles en comparación con 2017, agregó el reporte. Por lo tanto, los conflictos en Afganistán el año pasado cobraron el mayor número de vidas de civiles que en cualquier otro momento desde que se han guardado los registros.

La ONU pidió la necesidad urgente de aprovechar las oportunidades de paz en el país, ya que la cifra del informe era un claro indicador de la intensificación de la violencia.

El informe culpó a los talibanes y Daesh de la Provincia de Khorasan (ISKP) por el 67% de las víctimas civiles del año pasado.

Este es el décimo informe anual de la ONU que documenta la difícil situación de los civiles en el conflicto afgano: más de 32.000 civiles muertos y alrededor de 60.000 heridos en una década.

Tadamichi Yamamoto, Representante Especial del Secretario General para Afganistán, instó a todas las partes a tomar medidas concretas inmediatas y adicionales para detener una mayor escalada en el número de civiles heridos y vidas perdidas.

“El conflicto en Afganistán sigue matando a demasiados civiles y ha causado sufrimientos duraderos, tanto físicos como psicológicos, a muchos otros”, declaró la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.

Por primera vez desde 2009, cuando se comenzó a documentar sistemáticamente las cifras de víctimas civiles, Unama registró más de 1.000 víctimas civiles por operaciones aéreas.

De estos, la Unama atribuyó la responsabilidad a las fuerzas militares internacionales por 632 víctimas civiles (393 muertos y 239 heridos), y a la Fuerza Aérea Afgana por 304 (118 muertos y 186 heridos).

Con las consecuencias de una apresurada retirada de Estados Unidos que se hizo eco en todo el país, Afganistán tuvo un sangriento comienzo en 2019 con más de 1.700 víctimas relacionadas con la guerra solo en enero.

Las cifras compiladas por la Agencia Anadolu sugieren que la guerra se prolongó a pesar de la calma en esta época del año en medio del invierno.

Las estimaciones sugieren que más de 900 personas murieron y al menos otras 800 resultaron heridas en ataques terroristas por parte de los rebeldes, así como en operaciones de seguridad por parte de las fuerzas afganas y aliadas. AA