¿Comemos carne o no?

De los cerdos y las vacas hemos sabido esta semana algo sorprendente. La Organización Mundial de la Salud ha anunciado que la carne procesada puede provocar cáncer. La noticia ha causado tanto revuelo que la organización tuvo que matizar unos días después. ¿En qué queda la advertencia?

El riesgo depende del tipo de carne, de si es roja o procesada. La roja viene directamente de un mamífero: vaca, cerdo, cordero, caballo o cabra. Por ejemplo, un filete. La procesada es la que ha sido ahumada o transformada con sal, mediante curación o fermentación. En es grupo están las hamburguesas, las salchichas, los embutidos o el jamón.

Esos productos procesados son los que ahora han subido al grupo de las sustancias que causan cáncer, sobre todo de colon. Están en el mismo escalón, por ejemplo, que el tabaco.

La carne roja se queda en el segundo escalón: no está demostrado que cause cáncer, pero es probable.

La primera pregunta es: ¿cómo de alto es el riesgo? El informe sólo pone un ejemplo concreto: si comemos todos los días 50 gramos de carne procesada, más o menos dos lonchas de bacon, la probabilidad de sufrir cáncer de cólon aumenta un 18%. Ese 18% es sobre el riesgo que ya tenemos. Es decir, si tenemos de media un 5% de posibilidades de sufrir cáncer de colon, comiendo esa cantidad el riesgo aumenta al 6%. El incremento, por tanto, no es muy marcado. No es comparable, por ejemplo, con el tabaco. Si los dos están en el mismo escalón es porque su relación con el cáncer está demostrada, no porque el riesgo sea parecido. Eso se ve en las víctimas que causan.

La OMS asegura que cada año mueren 34.000 personas por cáncer asociado a comer carne procesada. La contaminación, por ejemplo, provoca 200.000 muertes, el alcohol 600.000 y el tabaco, un millón..

Pero ¿es lo mismo una salchicha que un jamón de jabugo? La OMS no ha estudiado las diferencias entre productos, pero algunos expertos consideran que sí hay diferencias, y que incluso productos como el jamón no deberían estar en ese grupo.

Pedro Valero, oncólogo:

"No tiene una manipulación. No se le añaden productos tóxicos o cancerígenos, así que se debería segurir considerando carne roja"

Entonces, en resumen, ¿qué hay que hacer?

La Organización Mundial de la Salud recomienda reducir el consumo, pero no da cantidades concretas. Ante esa ambigüedad, la agencia española de seguridad alimentaria ha dado su recomendación.

Teresa Romero, directora de la Agencia de Seguridad Alimentaria:

"La recomendación es de dos raciones a la semana"

En resumen, carne sí, pero dos veces a la semana, y limitando sobre todo la procesada.