Erdogan: “Seguiremos defendiendo el derecho y la justicia”

El presidente Recep Tayyip Erdogan declaró que la comunidad internacional no podría dar una buena prueba en el manejo de los efectos devastadores de la epidemia del nuevo tipo de coronavirus.

“El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas pudo incluir la mayor crisis de salud de la historia en su agenda 100 días después. Es importante no permitir el nacionalismo de vacunas para que no repitan los errores cometidos durante el período epidémico”, dijo.

Durante el Foro de Diplomacia de Antalya, al expresar que Turquía envió suministros médicos a 158 países y 12 organizaciones internacionales durante la epidemia de coronavirus, agregó:

“Continuamos con nuestros estudios de vacunas turcas, que planeamos completar antes de fin de año, con un enfoque humano y universal. Espero que compartamos nuestra vacuna con toda la humanidad.

Las principales estructuras sobre las que se construye el sistema global, especialmente el Consejo de Seguridad de la ONU, son parte del problema, no la solución. No podemos continuar nuestro camino en el siglo XXI con estas estructuras institucionales.

El destino de aproximadamente 8 mil millones de personas no puede quedar a merced de 5 miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. El sistema que otorga a 190 países el derecho a sentarse a la mesa por un tiempo, pero no les da voz en su propio destino, no puede producir justicia. Donde no hay justicia, no faltará el conflicto, la tensión y la violencia. Seguimos y seguiremos defendiendo el derecho y la justicia”.

En su discurso, el presidente también afirmó que Turquía es el país con la quinta red diplomática más grande del mundo, con 252 representantes extranjeros.

En cuanto a la lucha contra el terrorismo, Erdogan dijo que Turquía es el primer país en tener presencia sobre el terreno contra organizaciones terroristas como PKK, YPG y DAESH que operan en Siria.

“Neutralizamos a 4.500 miembros del DAESH. Hasta la fecha, hemos asegurado el regreso de 430.000 sirios a sus tierras. Los rescatamos de las carpas. Apoyamos proyectos como casas de briqueta.

A los asesinos que asesinaron a civiles en nuestro país se les otorgó un estatus político y fueron custodiados durante años. Se intentó establecer un estado terrorista a lo largo de nuestra frontera sur. Proporcionar paz y estabilidad en Siria no es solo responsabilidad de Turquía, sino de todos nosotros.

Está en nuestras manos garantizar que los recursos energéticos del Mediterráneo Oriental conduzcan a la cooperación en lugar de al enfrentamiento. En el próximo período, queremos fijar un tramo de la brújula en Turquía y aumentar la cooperación con el otro en todas las geografías, desde África hasta América Latina, desde el Pacífico hasta Asia”, concluyó el presidente.