Telón Final en Idlib

El análisis de Can Acun, investigador de la Fundación de Estudios de Política, Economía y Sociedad (SETA)

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Telón Final en Idlib

Las fuerzas afiliadas al régimen de Asad han comenzado a atacar la región de Idlib nuevamente en los últimos días con el apoyo aéreo ruso. El ataque a la región, que está en manos de la oposición siria y donde viven aproximadamente cuatro millones de civiles, ha vuelto a abrir la puerta a una importante crisis humanitaria. Mientras Turquía intenta tomar medidas de disuasión militarmente con la conciencia del peligro, el silencio de la opinión pública internacional alienta al régimen de Asad y sus aliados.

Si bien los desarrollos militares y los conflictos en el campo sirio han seguido un curso relativamente tranquilo en los últimos meses, el régimen de Asad ha comenzado a atacar Idlib nuevamente con el apoyo de la fuerza aérea rusa. Con la cumbre de líderes celebrada en Sochi y el acuerdo entre Turquía y Rusia sobre la región, los conflictos llegaron a su fin a gran escala. Sin embargo, en las últimas semanas, hemos comenzado a presenciar nuevamente los ataques que han ido aumentando en ritmo. Se ve que las fuerzas afiliadas al régimen atacan la región de Jabeli Zawiya, especialmente en el sur de la línea M4, desde tierra y los rusos desde el aire. Cuando examinamos el curso de acción básico, se ve que tienen la intención de establecer una presión militar de una manera que asegure que los elementos de la oposición siria y el ejército turco se retiren hacia el norte. La región de Jabeli Zawiya es topográficamente muy alta en comparación con el resto de Idlib, por lo que es una región estratégica. Las fuerzas del régimen parecen tener la intención de establecer un control paso a paso instalándose en esta región y obteniendo potencia de fuego en las líneas que se extienden al norte de Idlib. Una vez más, tiene la intención de establecer un dominio total en la línea logística M4 y controlar las carreteras principales desde Alepo a Latakia-Tartus en el eje este-oeste.

Como siempre, los civiles pagan el precio de estos ambiciosos planes del régimen y sus aliados. Ya decenas de miles de civiles han sido desplazados hacia el norte. Cientos de miles de civiles más podrían verse desplazados por una posible operación militar integral. Teniendo en cuenta la posible crisis humanitaria, Turquía está tratando de aumentar su fortificación militar en la región y disuadir militarmente al régimen y elementos aliados. La comunidad internacional, especialmente Estados Unidos, debe demostrar que un nuevo intento de operación militar tendrá costos al presionar a Rusia. De lo contrario, ha vuelto a surgir un terreno de conflicto en Siria.

 



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