Moscú afirmó que respuesta de EEUU a su propuesta de ‘garantías de seguridad’ no es positiva

El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, aseveró este jueves que la respuesta de Estados Unidos a las propuestas de su país sobre garantías de seguridad está lejos der una “reacción positiva” a su principal petición sobre la no expansión de la OTAN hacia el este.

En un comunicado, Lavrov manifestó que la respuesta ofrece terreno para conversaciones serias solo sobre asuntos de importancia “secundaria”.

“El problema principal es una mayor expansión de la OTAN hacia el este y el despliegue de armas de ataque que pueden amenazar el territorio de la Federación de Rusia”, afirmó Lavrov.

Lavrov consideró que la respuesta de Estados Unidos se filtrará en los medios pronto y que su contenido estará disponible “para el público en general”.

El ministro ruso recordó que Rusia ha estado planteando sus preocupaciones sobre la seguridad y la expansión de la OTAN hacia el este desde la década de los 90, pero que todos estos esfuerzos han sido en vano.

Lavrov aseguró que la expansión de la alianza contradice tratados internacionales como la Declaración de Estambul de 1999 y la Declaración de Astana de 2010 entre miembros de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).

Así mismo, Lavrov dijo que, según las declaraciones, los Estados tienen derecho a elegir libremente sus alianzas militares, pero que cada Estado está obligado a “no fortalecer su seguridad a expensas de la seguridad de los demás”.

“En otras palabras, el derecho a elegir alianzas está claramente condicionado por la necesidad de tener en cuenta los intereses de seguridad de cualquier otro estado de la OSCE, incluida la Federación de Rusia”, explicó Lavrov.

El canciller ruso señaló que los países occidentales no tienen en cuenta el segundo principio mientras que sí promueven el primero.

“No podemos aceptar tal situación, tenemos estos compromisos por escrito y han sido confirmados dentro de la OSCE más de una vez. Ahora nos centraremos en explicar esta astuta posición de nuestros colegas occidentales”, dijo Lavrov.

El jefe de la diplomacia rusa indicó que preguntó al secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, sobre su opinión sobre el tema, pero agregó que solo “se encogió de hombros”.

Lavrov indicó que Rusia enviará solicitudes oficiales a todos los países cuyos líderes hayan firmado las declaraciones en un futuro próximo para aclarar la situación y añadió que las autoridades rusas están evaluando las respuestas.

El ministro también dijo que informará al presidente Vladimir Putin sobre el asunto y que este tomará una decisión sobre cómo proceder.

El miércoles el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, anunció que la organización trasatlántica entregó a Rusia su respuesta a la propuesta sobre las garantías de seguridad que Moscú exige.

“La OTAN es una alianza defensiva y no buscamos la confrontación, pero no podemos y no transigiremos con los principios sobre la seguridad de nuestras alianzas y la seguridad de Europa y América del Norte”, aseveró Jens Stoltenberg durante una rueda de prensa.

En su respuesta a dos borradores entregados por Rusia a EEUU y la OTAN el pasado mes de diciembre, la OTAN rechazó las demandas rusas de retirar sus tropas y armas de Europa del Este y detener la integración transatlántica de Ucrania.

La alianza militar también pidió a Rusia que reduzca las tensiones con Ucrania y entable un diálogo y que retire sus fuerzas de Ucrania, Georgia y Moldavia.

El secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, indicó que su país también respondió oficialmente a las propuestas de Moscú sobre los acuerdos de seguridad europeos.
EEUU, con sus aliados europeos, ha estado advirtiendo que Rusia está preparando el escenario para una invasión a Ucrania y ha posicionado previamente a más de 100.000 soldados en su frontera.

Moscú ha negado que se esté preparando para una ofensiva militar, argumentando que sus tropas están allí para realizar ejercicios regulares.

La OTAN comenzó a aumentar su presencia en Europa del Este tras la anexión ilegal de Crimea por parte de Rusia en 2014, acción que nunca fue reconocida internacionalmente y que ha sido considerada como ilegal por el derecho internacional.