Policía francesa desmantela un campamento de refugiados en Calais
Los alemanes se muestran molestos por la postura hacia los refugiados en Francia
La policía francesa intervino con gas lacrimógeno y agua a presión contra los que no querían dejar sus tiendas de campaña durante el desmantelamiento del campamento de refugiados en la ciudad portuaria de Calais en la costa del Canal de la Mancha.
Centenares de policías de operaciones especiales tomaron las medidas de seguridad en las tempranas horas de la madrugada en la parte sureña del campamento donde se encontraban los refugiados, la mayoría de ellos provinieron de Siria, Irak, Eritrea y Afganistán.
Los empleados entraron en el campamento bajo la protección de la policía para desmantelar las campañas de tienda. Las restantes pertenencias de los refugiados fueron cargados en los contenedores de basura con los bulldozers.
Durante el desmantelamiento algunos refugiados llevaban una pancarta en la que se leía "no somos terroristas, no destruyáis nuestras casas", mientras un refugiado hizo una protesta silenciosa subiendo una tienda de campaña con una divisa sobre la que se leía "busco libertad en Europa, pero no hay nada".
Algunos refugiados prendieron fuego a las tiendas de campaña donde se quedaban en protesta del desmantelamiento.
Se apagó el fuego, pero se aumentó la tensión en el campamento cuando continuaba el desmantelamiento.
Al menos tres personas se han detenido durante los sucesos.
Algunos refugiados desalojados fueron trasladados en dos autobuses a los campamentos que se encuentran en otras ciudades de Francia.
Y resultó que los alemanes se muestran molestos por la postura hacia los refugiados en Francia.
El 83% de los participantes de la encuesta realizada por la primera cadena de la televisión alemana ARD indicó que tiene vergüenza de los ataques contra los campamentos de refugiados.
El índice de los que respondieron la misma respuesta en septiembre fue el 79%.
El 76% de los alemanes señaló que los políticos deben condenar más fuertemente este tipo de ataques, al tanto que el 58% de ellos piensa que las autoridades no hacen lo requerido para proteger a los extranjeros y refugiados de los ataques.
Respecto a la gestión de la crisis de inmigrantes, el 77% de los alemanes abogan por el desarrollo de una postura en Europa.
El porcentaje de los que defienden que se debe aumentar el número de refugiados en Alemania subió al 63%. Esta alza se debió a la xenofobia marcada el mes pasado en el Estado de Sajonia.
En la ciudad de Clausnitz una multitud enfadada de ultraderechistas protestaron a los refugiados organizando una manifestación frente al autobús que llevó a los refugiados a la ciudad.
Las imágenes en las que se mostraba que la policía forzaba a los refugiados del autobús durante la protesta provocaron una indignación en la opinión pública.
En la ciudad de Bautzen se prendió fuego a un edificio que se pensaba utilizar como instalación de refugiados.
