La Fiscalía de Bolivia solicita seis meses de prisión contra la expresidenta Jeanine Áñez
El ente advirtió que si los exfuncionarios quedan en libertad, existe la posibilidad de fuga ya que podrían salir del país
AA - La Fiscalía de Bolivia solicitó seis meses de prisión preventiva contra la expresidenta interina Jeanine Áñez y dos de sus exministros por los delitos de terrorismo, conspiración y sedición en el caso del golpe de Estado.
El ente advirtió que si los exfuncionarios quedan en libertad, existe la posibilidad de fuga ya que podrían salir del país.
La exmandataria fue aprehendida en las primeras horas del sábado, tras un operativo policial realizado en la ciudad de Trinidad, señaló la Agencia Boliviana de Información (ABI).
La Fiscalía emitió una orden de aprehensión en contra de Áñez y sus exministros Arturo Murillo, Yerko Núñez, Álvaro Coímbra, Fernando López y Rodrigo Guzmán, en el marco del denominado "caso golpe de Estado".
En este contexto, el ministro de Justicia de Bolivia, Iván Lima, remarcó que la expresidenta es procesada en calidad de exsenadora -y no como exmandataria- por una demanda instaurada por la exdiputada del Movimiento Al Socialismo (MAS), Lidia Patty, en diciembre de 2020.
“En este momento estamos ante un juicio a una exsenadora, por lo tanto, no corresponde un juicio de privilegio constitucional y esa es la realidad de los hechos, cuando se la juzgue como expresidenta se tendrá que evaluar en qué caso va a la Asamblea y si autoriza el enjuiciamiento, en este caso estamos ante un juicio ordinario”, dijo el funcionario en una entrevista con la emisora estatal Patria Nueva.
Por su parte, la exmandataria manifestó por su cuenta de Twitter que “en un acto de abuso y persecución política el Gobierno del MAS me ha mandado arrestar. Me acusa de haber participado en un golpe de Estado que nunca ocurrió. Mis oraciones por Bolivia y por todos los bolivianos”.
Así las cosas, Añez le envió una carta a la Organización de Estados Americanos (OEA) y a la Unión Europea (UE) en la que pide que envíen observadores al país “frente al plan del Gobierno del MAS para instalar una dictadura en Bolivia”.
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