El sector minero se enfrenta al Gobierno de Evo Morales en rechazo a una ley

La Paz (EFE).- Las cooperativas mineras de Bolivia, un sector políticamente influyente y tradicionalmente aliado del presidente Evo Morales, se mantuvo enfrentado al Gobierno con más bloqueos de carreteras para rechazar una reforma legal que permite la creación de sindicatos en esas organizaciones privadas.

Las miembros de la Federación de Cooperativas Mineras (Fencomin) protagonizaron hoy por segundo día consecutivo los bloqueos y los extendieron a carreteras de La Paz, Oruro, Potosí, Cochabamba, Chuquisaca y Santa Cruz, seis de los nueve departamentos del país.

El ministro boliviano de Gobierno (Interior), Carlos Romero, confirmó que los mineros usan explosivos para mantener los cortes en once puntos de las rutas, aunque por la tarde la Policía despejó con gases lacrimógenos dos de ellos en La Paz y Cochabamba.

Según Romero, al menos 5.200 mineros están movilizados en las diferentes carreteras haciendo detonar cargas de dinamita e incluso en un lugar de los valles centrales, Sayari, los trabajadores tienen fusiles Mauser, con los que amenazan a los agentes si se acercan.

Las operaciones de desbloqueo se saldaron con nuevas detenciones de mineros y con la retención por parte de los manifestantes, según sus dirigentes, de policías que son considerados rehenes, si bien el Gobierno no ha confirmado esta información.

En la madrugada de este jueves, los mineros liberaron a decenas de agentes que estuvieron retenidos desde el miércoles, después de que la Fiscalía de El Alto, ciudad vecina de La Paz, ordenara, a su vez, dar libertad a los obreros arrestados.

Los enfrentamientos desde el miércoles también han dejado varios heridos por lesiones entre los mineros y los policías.

Los mineros asociados en cooperativas exigen que el oficialismo retroceda en la aprobación de una reforma legal que consideran perjudicial porque alienta la formación de sindicatos en esas organizaciones que funcionan con decenas de miles de subcontratados.

Las cooperativas mineras siempre han afrontado críticas porque internamente, según las investigaciones sobre el sector, se dividen entre grupos de socios que operan como empresarios y los obreros de verdad que trabajan en condiciones de explotación para los primeros.

El Gobierno sostiene que esa reforma legal sobre los sindicatos en las cooperativas no alcanzará a las organizaciones mineras, por lo que cree que detrás de las protestas hay un trasfondo vinculado a un intento de las cooperativas de tener más beneficios del Estado.

"El problema de fondo es que los cooperativistas con estas actitudes violentas pretenden chantajear al Gobierno para exigirle la modificación de la ley de Minería con el propósito de que les permita firmar contratos de asociación con empresas privadas nacionales y trasnacionales", sostuvo Romero.

Los dirigentes de la Fencomin han defendido la posibilidad de que en efecto se permita la asociación de las cooperativas mineras con privados argumentado que permitirá al Estado recaudar más recursos provenientes de impuestos, ahora que el sector vive una crisis.

Según Romero, esa posibilidad es contraria a la Constitución, que establece la propiedad del Estado sobre los recursos naturales.

Uno de los dirigentes de la federación de mineros de La Paz, Federico Escobar, anunció a los medios que los bloqueos de vías continuarán este viernes y que, de agravarse el conflicto, los trabajadores se defenderán con bombas molotov y explosivos.

"Si nosotros vamos a comenzar a utilizar eso, en una arrojada siquiera unos 20, 30 policías van a tener que fallecer", advirtió Escobar en declaraciones a radio Erbol.

El ministro boliviano de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, envió una carta a los cooperativistas en la que destacó la disposición mostrada por algunos dirigentes para dialogar con el Ejecutivo, pero pidió que previamente se suspendan las protestas. EFE