Las causas y probables consecuencias de la crisis en Sudán
Aunque es difícil tener esperanzas sobre el futuro de Sudán, no hay que perder la esperanza de una solución pacífica

Las causas y probables consecuencias de la crisis en Sudán
Los recientes conflictos en Sudán exponen que la crisis política crece exponencialmente. No obstante, el 14 de abril de 2023, el ejército sudanés irrumpió en el cuartel de las Fuerzas de Apoyo Rápido. Actualmente, predomina la opinión de que las tropas de Hemedti además del ejército de la República de Sudán constituyen dos estructuras militares diferentes. Burhan trata de debilitar las tropas de Hemedti, pero parece que ya es muy tarde. Entre las partes de la crisis política en el país africano se encuentran el gobierno civil, la administración militar, partidos políticos y ONGs. Entre los motivos básicos de la convulsión en Sudán sobresalen la crisis económica, corrupción, injusticia social, demoras en el proceso de la democratización, conflictos étnicos y religiosos.
Un análisis del Prof. Dr. Murat Yeşiltaş, director de Investigaciones de Seguridad, SETA
La disputa vivida cuenta con el potencial para agravar la crisis política y desatar una inestabilidad en Sudán. Aparte, el líder de la FAR, Hemedti, era una figura con fuerte presencia militar en el país. Por lo mismo, la tensión entre Hemedti y Al Burhan podría arrastrar el país africano hacia una guerra civil convirtiéndose en un conflicto militar. Además, la tensión podría profundizar más la actual crisis política, influyendo negativamente en el proceso político. Además, la posición geopolítica de Sudán puede hacer que otros países de la región, especialmente los países vecinos de Sudán, queden involucrados en la crisis política. Esto podría profundizar la crisis en Sudán, complicando aún más el país y la región.
No obstante, Egipto podría involucrarse en la convulsión con el objetivo de eliminar sus preocupaciones en materia de la administración de las fuentes sudanesas sobre el Nilo y debido a que la inestabilidad política podría afectar la seguridad de Egipto. Ya que, Sudán construyó presas Roseires, Sennar y Merowe sobre el Nilo. Por lo tanto, estas presas, que desempeñan un papel crucial en la producción de energía hidroeléctrica y que suministran el regadío agrícola, tienen una importancia clave para la gestión de los recursos hídricos de Sudán.
En segundo lugar, Sudán y Etiopía estaban en conflicto de intereses debido a los enfrentamientos en Tigray en el nordeste de Sudán. En tercer lugar, se trata de muchas discordias entre Sudán y Sudán del Sur en la actualidad. La crisis actual en Sudán podría afectar negativamente la solución de estos desacuerdos. Así que, Sudán del Sur podría estar involucrado en la crisis en Sudán.
En cuanto a las potencias no regionales, se dice que Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí tienen relaciones cercanas con algunos grupos en Sudán. La crisis podría afectar los intereses de estos estados y provocar su involucración más en ella. Además de estos países, la Unión Africana (UE), la Liga de los Estados Árabes (AL) y otras organizaciones regionales también podrían participar en la resolución de la crisis en Sudán. Sin embargo, es muy necesario hacer todas las intervenciones de una forma pacífica en beneficio del pueblo sudanés, respetando la soberanía de este país.
Por este motivo, es de importancia vital para garantizar la estabilidad en el país el hecho de que las partes cooperen mediante diálogo y reconciliación para resolver la tensión dentro de la administración sudanesa. Además, se debe iniciar un proceso político con la implicación de todos los sectores de Sudán y este proceso debe ser apoyado para una solución sostenible. Obviamente, los conflictos en Sudán suponen una amenaza para estabilidad. Pero, se necesita una voluntad política y un proceso de negociaciones serios para resolver la crisis. En caso contrario, Sudán podría arrastrarse hacia un caos como en Libia. Sudán tiene problemas también con sus vecinos Egipto, Sudán del Sur y Etiopía. La tensión es una enorme amenaza para el futuro de este país.
La comunidad internacional debe esforzarse para poner fin a los conflictos y apoyar a Sudán. Pero tampoco que hay que omitir la crisis económica en que se encuentra inmerso el país africano. Esta crisis dificulta el proceso de negociaciones. Aunque es difícil tener esperanzas sobre el futuro de Sudán, no hay que perder la esperanza de una solución pacífica.
Murat YEŞİLTAŞ