Los Turcos que Dejaron Huella en el Mundo (16/2014)

En nuestros programas anteriores intentábamos presentarles algunos de los mayores personajes políticos, culturales, literarios y artísticos que dejaron huella en el mundo. En el programa de esta semana pretendemos informarles sobre Abu Jafar Muhammad Ibn Muhammad Ibn al-Hasan Nasir al-Din al Tusi, conocido como Nasir al-Din al-Tusi, el gran científico y uno de los nombres ideólogos del mundo en los campos tal como astronomía, matemáticas, música, derecho y filosofía.

Nasir al-Din al-Tusi nació en una familia eminente y educada el 17 de febrero de 1201 en la ciudad de Tus de Jorasán (Persia y en la actualidad Irán). Su padre fue una de las figuras más conocidas de la época y fue experto en derecho y teología. Nasir al-Din al-Tusi recibió su primera educación al lado de su padre. No se conformó solamente con conocer la ciencia de teología y la filosofía islámica con la sugerencia de su padre. Además, comenzó a descubrir con gran seriedad diversos ramos científicos al lado de los sabios diferentes. Tusi, que tomó lecciones de los mejores maestros en las áreas de medicina, filosofía, derecho, política, matemáticas y astronomía, luego se desplazó a Kohistan, centro de los ismailíes (una secta que reconoce a Ismael ibn Ya’far como séptimo imán chií). Tusi fue asignado como primer asesor del gobernante. Nasir al-Din al-Tusi completó en 1235 su famosa obra “Ahlak-ı Nasıri” (Moralidad de Nasır), aceptada como el primer libro sistemático de moralidad. Pero, como se entiende del prólogo de la obra, comenzaron a estallar problemas serios entre Tusi y el gobernante en este período. El propio Tusi lo explicó de la siguiente forma: “Este libro fue escrito en un período muy complicado. Me distancié de mi patria con el juicio del destino y estoy en una situación muy difícil en Kohistan”. La situación difícil mencionada por Tusi había resultado con la vida de cárcel en la fortaleza de Alemut siendo detenido en 1235. La vida de fortaleza, que duró cerca de 20 años y que continuó hasta el año 1256, terminó con la victoria de Hulagu Kan, nieto de Gengiz Kan, en frente de los ismailíes. Nasir al-Din al-Tusi compiló obras muy importantes en su vida de fortaleza de 20 años. Sus actividades científicas, su opinión mundial y su inteligencia no escaparon de la atención de Hulagu Kan, y le asignó como asesor principal. Tusi tuvo opiniones tan importantes tanto sobre el área de ciencia como sobre la política y el estatismo. Tusi, que obtuvo un ambiente nuevo y adecuado para sus actividades científicas con la fundación del Estado Turco-Mongol en Irán, construyó uno de los mayores observatorios de la época en la capital de Maraga, y lo convirtió en el centro de los estudios astronómicos.

Tusi intentaba convencerle en cuatro temas importantes después de hacerse el asesor más cercano de Hulagu Kan: “Proteger y esconder a los sabios y beneficiarse de ellos para el desarrollo de la ciencia”, “Mejorar las condiciones graves del pueblo y regular de nuevo los impuestos de manera justa”, “fundar el observatorio que desempeñará un papel importante en el desarrollo de la ciencia”, y “mudar la Biblioteca de Bagdad a Maraga”.

Después de tomar la aprobación de Hulagu Kan en 1258, Tusi comenzó a construir el observatorio más magnífico del Oriente, Maraga. El complejo de observatorio se compone de 13 edificios, que divide en dos grupos como base y auxiliar. En el grupo del primer edificio se colocan aparatos que sirven para hacer observaciones astronómicas. Y en el segundo se hallan madrazas, bibliotecas y tiendas. El observatorio, que costó 30 mil dinares de oro, comenzó a operar completamente en 1271 después de 12 años del inicio de su construcción.

El nombre de Nasir al-Din al-Tusi, que tiene un lugar importante en la historia científica del mundo, se menciona aún en diversas geografías y en diferentes campos. Por ejemplo, se bautizó como Nasir al-Din al-Tusi un volcán grande en el hemisferio del sur. Además, se llama Nasir al-Din al-Tusi un planeta descubierto en 1979 por un astrónomo ruso. Hay que recordar que se halla la Universidad de Nasir al-Din al-Tusi en Teherán y un observatorio llamado Nasir al-Din al-Tusi en la República de Azerbaiyán.

Podemos decir en resumen que el centro humano tiene un lugar sustancial en la idea mundial de Tusi. Él intenta determinar los criterios básicos de las conductas humanas en sus obras. Para este propósito, en su obra “Ahlak-i Nasıri”, Tusi trata los problemas de crear el humano ideal, la familia ideal y la sociedad ideal, e intenta resolver las estructuras básicas de los elementos principales de las sociedades como individuo, familia y estado, y otras subunidades sociales. Y la ciencia constituye el fundamento básico de la idea mundial de Tusi. Su conducta científica ante los hechos es el carácter más importante que trae sus ideas al presente.

RIZA HEYET