El Templo de Artemisa y la maravillosa antigua ciudad de Éfeso

"Vi el muro de la orgullosa Babilonia sobre el cual se encuentra un camino para carros,  los jardines colgantes y la estatua de Zeus en Alfeo (Alpheus) ... y la enorme estatua del sol ...y las altas pirámides construidas con gran esfuerzos ... y el enorme Mausoleo de Halicarnaso o el Sepulcro de Mausolo... Cuando vi la casa de Artemisa construida sobre nubes, todas las demás maravillas perdieron su brillo y dije“ ¡Aquí, el sol nunca ha visto algo tan glorioso fuera del Olimpo!"

Estas son las palabras del poeta griego Antípatro de Sidón. Usó estas frases para el Templo de Artemisa, una de las siete maravillas del mundo. Antípatro de Sidón identificó impresionantes obras de arte en los lugares que visitaba en la Antigüedad y las escribió en su libro "Sobre las siete maravillas del mundo". Habló de obras arquitectónicas que se deben ver en su libro. Aunque se afirma que Herodoto había propuesto esta idea por primera vez, no identificó ni escribió algo sobre las siete maravillas del mundo. Filón de Bizancio también contribuyó al poeta griego Antípatro para determinar esa famosa lista de la Antigüedad. Filón de Bizancio expresó con estas palabras cómo fue impresionado por el templo de Artemisa:

"Vi la poderosa artesanía de los antiguos babilonios y el Sepulcro de Mausolo. Pero cuando vi el templo en Éfeso que se elevaba hacia las nubes, todos los demás estaban en las sombras".

Hoy, les contaremos sobre el Templo de Artemisa, un magnífico monumento arquitectónico que sorprende incluso a la gente de hoy con sus pinturas.

Las siete maravillas del mundo antiguo son la Pirámide de Keops, los Jardines Colgantes de Babilonia, la Estatua de Zeus, la Estatua de Rodas, el Faro de Alejandría, la Tumba del Rey Mausolo (Mausoleo de Halicarnaso) y el Templo de Artemisa en Éfeso.

Estas obras son estructuras extraordinarias que revelan la imaginación humana y su nivel en términos de arquitectura e ingeniería. Las llamamos extraordinarias porque cada una de ellas son monumentos de proporciones y límites gigantes que desafían el tiempo. Todas estas obras llegan al cielo, los seres humanos parecen tan pequeños e insignificantes como la hormiga al lado de su tamaño. Quizás el propósito de estas magníficas estructuras que se elevan hacia el cielo es reforzar la influencia de los reyes o dioses en la Tierra y para enfatizar la impotencia de los humanos...

Solo la Pirámide de Keops en Egipto de estas siete maravillas del mundo antiguo ha sobrevivido hasta hoy. Otros, lamentablemente, no pudieron resistir la destrucción del tiempo, los desastres naturales y los humanos... Cuando miramos estas obras dibujadas o modeladas basándose en los registros de escritores antiguos, claro que nos impresionan las medidas, las proporciones y los esfuerzos para su construcción, pero de hecho estos monumentos nos muestran lo que los humanos pueden hacer cuando quieran. Porque son los humanos que construyen estas magníficas obras que enfatizan el poder de los dioses o reyes y la inmortalidad.

Anatolia acogió dos de las siete maravillas del mundo en la Antigüedad. Uno de ellos es el Mausoleo de Halicarnaso construido en nombre del Rey Mausolo y el otro es el Templo de Artemisa, que fascina incluso a quienes fijaron las siete maravillas. El templo, ubicado en el distrito de Selçuk de İzmir, se remonta a la Antigüedad. Los primeros hallazgos pertenecientes al templo se data de la Edad del Bronce Final. En otras palabras, la región donde se encuentra el templo sirve a la religión incluso hace 1100 años. Cuando se trata de la Antigüedad, Éfeso se convierte en un importante centro comercial con sus puertos. Esta vez se construye un enorme templo de piedra y pilares de madera en el lugar del antiguo santuario. Con el tiempo, Éfeso se convierte en una importante y magnífica ciudad portuaria del mundo antiguo. La ciudad es también una de las encrucijadas más importantes entre Asia y Europa. El Creso, el último rey de Lidia quien acuñó primeras monedas de oro y plata, después de capturar Éfeso, envía ayuda financiera para la construcción del templo dañado por la guerra. ¡El nuevo templo, hecho de mármol blanco y más de cien columnas, es cuatro veces el tamaño del antiguo! En el templo en el centro político y comercial del Mediterráneo, hay muchas esculturas, pero la más importante es la estatua de Artemisa, construida en oro y marfil, que es el elemento principal del templo. Artemisa de Éfeso es una de las diosas preciosas, quizás la más preciosa. Porque representa abundancia y fertilidad ...La figura de la diosa es bastante llamativa. Es la estatua de una mujer vestida con una falda larga decorada con ciervos, leones y abejas, con una corona larga y extravagante en la cabeza, con cuerpo cubierto de protuberancias en forma de huevo y los brazos extendidos. La figura de la diosa madre en Anatolia es similar a Cibeles en términos de significado, aunque no físicamente. Por eso es que Artemisa de Éfeso es tan prominente; ya sea quemado o destruido, el templo de Artemisa se reconstruye en todos los períodos.

Pausanias, el viajero y geógrafo lidio del período antiguo, expresa la importancia de Artemisa de la siguiente manera:

“Todas las ciudades adoran a Artemisa de Éfeso y los humanos la consideran superior a todos los dioses. En mi opinión, esto se debe a la fama de las Amazonas que tradicionalmente hacían una dedicación a su imagen, y también a que este templo es muy antiguo. Otros tres factores que contribuyen a esto son el tamaño del templo que sobrepasa todos los edificios humanos, la importancia de la ciudad de Éfeso y la reputación de la diosa que vivió allí“.

El Templo de Artemisa se convierte con el tiempo en un centro religioso y comercial, y los visitantes vienen de todas partes, hacen ofrendas y compras aquí. Un día, aparece un loco, en busca de tener fama, se da cuenta de que ser inmortal es posible a través de una acción que será recordada durante siglos o incluso milenios quemando el templo. El pueblo de Éfeso está muy enojado, lo condenan a la muerte, el castigo más duro, y anuncian que aquellos que mencionen su nombre terminarán en muerte. El nombre de Eróstrato, como Nerón, pasa a la historia, por eso las personas apasionadas por la fama son llamadas "eróstraticas" cientos de años después.

El gran daño al Templo de Artemisa después del incendio entristece a los vecinos de Éfeso, pero por otro lado, su confianza en la diosa fue dañada. ¿Cómo es posible que la diosa, a quien confían su vida y posesiones, no pudo protegerse de este fuego? La razón se revela tras un largo resentimiento. Esa noche la diosa Artemisa salió del templo para presenciar el nacimiento de un dios, Alejandro Magno, por lo que no pudo evitar el incendio. La reconstrucción del templo comienza de inmediato. Esta vez, se construye un templo una vez y media más grande que sus antiguas dimensiones. ¡El Templo de Artemisa, que ha sido reconstruido unas siete veces a lo largo de la historia, resurge de sus cenizas una vez más! El cristianismo, una nueva religión, comienza a extenderse por el mundo unos siglos después. Esta nueva religión se encontró con una reacción en Éfeso, pero la creencia en la diosa Artemisa no pudo durar mucho tiempo y el cristianismo fue aceptado en el siglo IV. Ya no existen los antiguos dioses y diosas, el templo de Artemisa se destruye completamente, los aluviones llevados por el río llenan el puerto, la ciudad queda lejos del mar y Éfeso deja atrás sus viejos y gloriosos días.

Éfeso es uno de los centros más importantes de la Antigüedad, capital de la provincia asiática del Imperio Romano. Compite con Roma con su población de más de 200 mil habitantes y su riqueza arquitectónica. Se instalaron hititas, helenos, romanos y turcos, con lo que la ciudad deja ver el paso de diferentes civilizaciones y creencias. La antigua ciudad de Éfeso está incluido en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, después de Alejandría y Pérgamo, con el Templo de Artemisa, una de las siete maravillas del mundo antiguo, con su biblioteca Celco, una de las bibliotecas más importantes de la Antigüedad y un gran teatro con capacidad para 25.000 espectadores. Los cristianos creen que San Juan escribió su evangelio aquí y que la Virgen María falleció en estas tierras… Éfeso es una ciudad insustituible en términos de historia, religión y arquitectura.

Solo hay una columna de mármol donde se encuentra hoy el Templo de Artemisa. Aunque este templo, una de las siete maravillas del mundo, que alguna vez fue el santuario más importante del mundo, se vio obligado a reconstruirse muchas veces debido a guerras, saqueos e incendios, solo una columna de mármol ha sobrevivido hasta el día de hoy. Si visitan a Éfeso, es posible que no verán el Templo de Artemisa, que es una de las obras incomparables que demuestra lo que el humano puede hacer cuando quiera, pero si dejan libre su imaginación, pueden respirar el aire de aquellos tiempos y pueden presenciar los períodos presenciados por el templo. Porque la antigua ciudad de Éfeso está lista para ofrecerles sus experiencias con todo su esplendor ...

Por Neslihan Değirmencioğlu