La UE le pide a Nicaragua detener violencia contra los manifestantes

La Unión Europea (UE) le pidió al Gobierno de Nicaragua detener el uso desproporcionado de la fuerza contra los manifestantes.

Mediante un comunicado, los países europeos solicitaron a Managua que autorice el regreso de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh) para que pueda continuar su misión en el país y preste el apoyo necesario solicitado por el Mecanismo de Seguimiento de Nicaragua (MESENI) y el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) para llevar a cabo su mandato.

“Cinco meses después del estallido de las protestas sociales en Nicaragua, la situación en el país sigue siendo motivo de gran preocupación”, afirmó el bloque regional al señalar que la democracia, rendición de cuentas y el estado de derecho siguen siendo socavados gravemente por un entorno “represivo, que crea un clima de temor y desconfianza”.

Los 28 países de la UE también instaron al Ejecutivo de Daniel Ortega poner fin a los arrestos basados ​​en leyes que criminalizan la protesta pacífica, haciendo alusión al anuncio de la Policía del pasado fin de semana, así como la liberación de los manifestantes pacíficos y el restablecimiento del pleno respeto del debido proceso para todos los detenidos. Igualmente

“El diálogo nacional con el objetivo de alcanzar soluciones políticas a estos problemas está estancado debido a la falta de compromiso de las autoridades. La falta de cooperación oficial con las misiones internacionales que investigan los abusos de los derechos humanos impide que se cumpla a plenitud la rendición de cuentas y la justicia, y fomenta la impunidad”, añadió la nota de prensa.

La Unión Europea y sus Estados miembros reiteraron al país centroamericano reanudar el diálogo nacional para poner fin a la crisis, al reafirmar su apoyo a “un diálogo inclusivo sobre justicia y democracia”.

A finales del pasado mes de agosto la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) indicó que 322 personas habían fallecido hasta entonces en las protestas.

Por su parte, la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (Anpdh) elevó en septiembre a 512 la cifra de muertos por los episodios de violencia.

Las manifestaciones en Nicaragua fueron convocadas en abril en rechazo a una reforma al seguro social promovida por el Ejecutivo. El Gobierno revocó la propuesta, pero las protestas continuaron y se transformaron en unas movilizaciones en contra de la administración Ortega.