En Medio de la Naturaleza (16/2015)

Caminata de reconocimiento a las Cuevas de Küçükkürne en Malatya

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En Medio de la Naturaleza (16/2015)

El valle Levent, ubicado en las fronteras del departamento de Akçadağ de la provincia sureste turca de Malatya, es un lugar muy especial tanto por sus características geológicas como por las huellas de la vida humana. Esta característica del valle, por desgracia, no se sabe por la mayoría de los pobladores de Malatya. Las cuevas de Küçükkürne encabezan los lugares más atractivos del valle Levent. Dichas cuevas cuyas alturas superan 70 metros en algunos puntos acogían a los humanos hace miles de años.

La aldea de Küçükkürne se encuentra en el antiguo camino de Darende. Antes de llegar a la aldea, situada en la salida del valle Levent, les aconsejo que visiten la casa de Şükrü Kurt. La casa, que se parece con un nido de águila, se ubica en una posición que mira desde arriba a toda la aldea. El camino, que sube con formas espirales, concluye en el patio en frente de la casa de Şükrü Kurt. Cuando entramos en la casa, nos sentiremos un frío maravilloso. Los muros fríos de la cueva sirven para un acondicionador de aire en la casa en los tiempos más calientes del verano. Los muros de la cueva forman una mayor parte de los muros de la casa. La cocina y la sala de estar se encuentran dentro de la cueva. Solamente un muro del salón fue construido más tarde. De hecho Şükrü Kurt vive en una casa de cueva.

Si no desayunan, presenciarán un talento increíble de Şükrü Kurt. A poco tiempo Şükrü Kurt les ofrecerá muchos alimentos para el desayuno desde miel hasta mantequilla. Mientras desayunan, Şükrü Kurt comienza su charla fluente. El cuento más atractivo es que encontró agua cavando una grieta en la cueva. Lo que hace interesante la casa es otra cueva de dos pisos a que se puede entrar en el jardín trasero. Primero se camina sobre una barrera de cerca de un metro de anchura y diez metros de longitud. Luego se halla un túnel de seis metros de longitud, que es muy estrecho. Al pasar por el túnel, llegarán a una cueva grande de dos pisos. Şükrü Kurt les dice “soy la única persona que tiene una cueva de excavación privada en el mundo”. Según dice, llegaba aquí desde su infancia a fin de encontrar tesoro. Ahora dice tristemente que llega aquí para encontrar su juventud. Ya nos despedimos de él ya que llega el tiempo de hacer caminata natural y cultural.

En el programa de esta semana presenciaremos uno de los mejores ejemplos de la relación entre humano y naturaleza, y el talento de las personas que formaron estas cuevas hace miles de años. Veremos en esta etapa algunos mejores ejemplos del mundo cómo las personas formaron las cuevas, y cómo las convirtieron en campos habitables. Regresar de la casa de Şükrü Kurt, primero veremos una fuente sobre cual se halla un escrito romano en la entrada de la aldea de Küçükkürne. Cada punto de la aldea lleva huellas históricas. A poco tiempo llegaremos a unas casas al final de la aldea. La caminata de reconocimiento de las cuevas de Küçükkürne comienza en este camino que sale a las cuevas dentro de las cuevas. Este camino se convertirá en un sendero terminando después de unos cientos metros. Una parte de las cuevas pequeñas sobre el sendero se utiliza como almacén por los aldeanos. El sendero llega hasta la cueva a la derecha que tiene unos pequeños nichos. Desde aquí hacia adelante nos acompañarán los rocosos. Es más fácil caminar sobre rocosos por haber sido formado de barreras. La caminata sobre rocosos acabará en una plaza grande a poco tiempo. Una de las mayores cuevas es la cueva donde se encuentra esta plaza. La altura de la cueva alcanza 30 metros. Al lado de la barrera se sitúa un muro destruido en partes. Es obvio que fue construido a fin de proteger de los asaltos a los que vivían en la cueva. En la plaza veremos una cisterna de dos metros de profundidad y un metro de diámetro. Además, hoy en día sigue fluyendo el agua procedente de los pequeños hoyos dentro de la cueva. La estructura geológica de los arroyuelos muestra que los primeros habitantes de la cueva tenían información geológica. El agua de la cueva responde la necesidad de agua de los animales en la aldea que tiene problemas hídricos en los veranos. El punto más atractivo de la cueva es que tiene unos pisos. Los habitantes lograron desarrollar una tecnología para construir piso. El techo de la cueva está cubierto con decenas de monedas de hierro. De hecho eran muy abundantes, pero la mayoría fue abatida por escopeta. Todavía algunos piensan que hay tesoro debajo de las monedas. Pero, estas monedas cuyas conteras tienen anillos de hierro, podrían asegurar que los troncos, que forman los pisos, fueran más duros y más seguros.

Seguimos el sendero regresando de la cueva. A poco tiempo llegaremos a la cueva más alta y más amplia del valle Levent. Se acerca a 50 metros la anchura de la cueva cuya altitud puede alcanzar 70 metros. El total de los pequeños hoyos en la cueva se degeneró por la caída de las rocas. Las cuevas, formadas de unas barreras a partir de la cima, están colgadas en los muros también por la caída de las rocas. En el techo de estas pequeñas cuevas se hallan huellas sobre la vida humana. Y los colores brillantes en los muros muestran que ocurrieron mayores colapsos en la cueva. Antes de los colapsos, todas las cuevas unían la una a la otra. Los colapsos rompieron el vínculo de las cuevas. El sendero, que sigue dentro de la cueva grande, nos llevará a un sitio de tránsito. Detrás de este sitio veremos otra cueva grande. Podemos entender que las barreras en esta cueva fueron formadas también por los humanos. Era miles de personas la población de los habitantes en este mayor asentamiento. La última cueva no es grande más que la anterior, pero es abundante la huella de vida humana más que otras cuevas. Especialmente los hoyos primitivos en el suelo de la cueva muestran que la historia de la cueva es antigua más que los hititas.

Ya llega el tiempo de regresar. Bajaremos de las rocas. Fue construida una piscina de hormigón en el hoyo al lado del muro a la izquierda de la salida de la cueva. En esta piscina se recogen aguas que derraman de las cuevas en veranos, y riegan los campos agrícolas. Cerca de media hora llegaremos al punto de comienzo de la caminata.

Mientras dejamos atrás las cuevas de Küçükkürne, pensaremos cómo se hicieron esfuerzos los humanos para mantenerse la vida en estas tierras, y cómo construyeron refugios excavando las cuevas en gigantes bloques de roca. Y nos preguntaremos cuántos lugares existen que esperan a descubrirse.


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