Costumbres y Tradiciones de los Turcos (50/2014)

Darse regalos no es propio a la cultura turca, sino que también se observa en todas las culturas. Pero difieren el tiempo y la característica del regalo según las culturas. El regalo se da con el deseo sincero sin esperar la reciprocidad y para potenciar las amistades y recordar días especiales.

El Islam ordena regalarse subrayando la importancia de esta costumbre. Darse regalos incremente el cariño y la simpatía entre las personas. En la cultura turca se da especial importancia a los regalos. Cuando los turcos se convirtieron al Islam, esta costumbre empezó a hacerse más importante siendo un rasgo de la cultura turca.

El Corán dice: “Regalad, que sin duda el Creado quiere a los que regalan”. Regalarse es una buena ética que Alá quiere. Mahoma mandaba que se dieran regalos para que se potenciara el lazo de amistad entre personas. Su mujer, Aisha decía: “El profeta recibía regalos y se los daba a otros”. En uno de sus hadices, Mahoma decía: “Cuando uno de vosotros vuelva de una campaña, que regrese con un obsequio”.

La presencia de una nación depende de la existencia de su riqueza cultural. Darse regalos, uno de los ejemplos de ello, es una expresión de recordarse y hacer paz en los días especiales. Los artículos de khanes turcos en Asia Central eran saqueados por personas que se presentaban en los festines organizados por aquellos, eso era el reparto voluntario de los bienes de estas personas. En el palacio y casas otomanos se repartían regalos de “alquiler de diente” después de las cenas de la ruptura de ayuno en los meses de Ramadán.

El 21 de marzo, que es festejado como el día de comienzo del nuevo año y la fiesta de primavera, todos compraban regalos a sus familiares. El regalo que se repartía en el palacio otomano en el día de Noruz se llamaba “nevruzziye”. El sultán daba regalos a todos los sirvientes. También los dignatarios del estado presentaban un regalo especial al sultán en el Noruz. Se regalaban caballos, trajes y piedras preciosas entre los hombres de estado.

El rasgo económico del regalo no es tan importante para los turcos. Lo importante es recordar y dar regalos. En cada aspecto de la vida de los turcos darse regalos tiene un especial lugar. Cuando nace un bebé, los familiares, vecinos y amigos de la pareja vienen a visitarla con regalo que necesitará el hijo o la hija. Los más viejos traen oro. No terminan los regalos para el bebé. Cuando sale el diente del bebé, cuando es circuncidado y se matricula en la escuela primaria, también se le hacen regalos especiales.

Cuando los niños aprenden a leer el Corán y lo han leído todo, sus conocidos le regalan algo como expresión de elogio. También se da regalos a los muchachos que van a cumplir el servicio militar que es una importante fase en sus vidas. Otras ocasiones en que se dan regalos entre los turcos son; antes y después de las bodas; el yerno y su familia compran regalos a la nuera antes de las bodas. Estos regalos suelen ser una pulsera, collares, pendientes, sortija y oro, así como vestidos, bolso y abrigos. Durante la ceremonia de boda, los familiares de la nuera y del yerno le dan regalos de oro a la nuera. A los recién casados se les regalan utensilios domésticos o dinero. Estos regalos son importantes para dotar la casa. Los que compran casas en Turquía reciben regalos. La costumbre es preguntar a los que se casan qué necesitarán para su nueva casa. En las fiestas religiosas se traen caramelos y dulces a los familiares ancianos. Los que van a la peregrinación reciben regalos de sus familiares en expresión de despedida. También se da regalos a los peregrinos cuando vuelvan a casa. Los que van a ciudades lejanas o a otros países compran regalitos a sus amigos y familiares. Otras ocasiones en que se dan regalos son en la Noche Vieja, los días de cumpleaños, aniversario de matrimonio, día de la madre, día del padre, promoción y jubilación.

Por Fatma Ahsen Turan
Académica del Departamento de Lengua y Literatura Turcas – Universidad de Gazi, Ankara