Recorte en presupuesto para guardaparques pone a México lejos de cumplir los Acuerdos de París

Un recorte del 75% al presupuesto destinado a los guardaparques dificulta la protección de áreas protegidas y que el país pueda cumplir con varios acuerdos internacionales

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Recorte en presupuesto para guardaparques pone a México lejos de cumplir los Acuerdos de París

Por: Alejandro Melgoza Rocha

AA - El guardaparques Arturo González patrulla la mitad de la semana a bordo de su lancha en la zona arrecifal de Quintana Roo, ubicada en la Península de Yucatán y El Caribe, para evitar que esta sea dañada por los pescadores furtivos o por las embarcaciones privadas de turistas.

No obstante, a causa de la falta de presupuesto destinado a su labor por parte de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), Arturo no puede vigilar frecuentemente el Parque Nacional Costa Occidental de Isla Mujeres, Punta Cancún y Punta Nizuc, que pertenece al sistema arrecifal mesoamericano y donde residen amplias familias de corales y de manglares.

Para recorrer las más de 8.600 hectáreas de superficie del área que tiene asignada, el guardaparques necesita invertir 5.336 dólares en gasolina al mes, para hacer una vigilancia de cinco horas diarias, pero solo recibe 667 dólares, de modo que se ve en la necesidad de apoyarse en la sociedad civil. “En los gobiernos no ha sido una prioridad el sector ambiental”, apunta González, quien ya tiene más de una década en este oficio.

Y ahora los guardaparques se enfrentan a un nuevo golpe presupuestal del 75%, el cual fue anunciado el pasado 2 de junio, como parte de las acciones de la Ley Federal de Austeridad Republicana decretada por el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.

Este anuncio preocupa a los funcionarios ambientales de las 182 áreas naturales protegidas de México, los cuales lanzaron la campaña “Salvemos Conanp”. La sociedad civil los ha apoyado, por lo que han logrado recolectar más de 198.000 firmas, al tiempo que una veintena de exfuncionarios ambientales le enviaron una carta al presidente en la que lo acusan de retrasar cuatro décadas la política medioambiental del país.

Expertos consultados por la Agencia Anadolu, que hacen parte de este grupo de exfuncionarios, aseguraron que si las negociaciones no logran evitar el recorte, se pondrían en riesgo dos cosas: tanto la riqueza de los ecosistemas como las metas de los acuerdos internacionales en materia ambiental a los cuales está suscrito México.

Para la doctora Julia Carabias, exsecretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (1994-2000), el recorte presupuestal “repercute sobre el tema del cambio climático (…) La mitigación que se tiene que lograr a partir de detener la deforestación no la vamos a lograr; después hay otros incumplimientos de energía y biodiversidad”.

“Estas políticas están representando un camino lleno de obstáculos para que las metas que tenemos comprometidas se puedan cumplir (…) ¿Con qué cara nos vamos a presentar con instituciones debilitadas? Los compromisos que adquirimos en el extranjero tienen una carga importante en nuestras relaciones multilaterales, y desde el punto de vista de nuestra legislación nacional, tiene repercusiones legales”, señala el maestro Luis Fueyo, excomisionado de la Conanp (2010-2015).

Cambio climático y biodiversidad

Las áreas naturales mexicanas protegidas abarcan unos 90,6 millones de hectáreas. De acuerdo con un análisis del Centro Interdisciplinario de Biodiversidad y Ambiente (Ceiba), México destina 45 centavos de dólar a la protección de cada hectárea. No obstante, en promedio un guardaparques tiene asignadas 70 mil hectáreas, es decir, casi la mitad de Ciudad de México.

Por esa razón, Fueyo considera que un 75% menos de presupuesto generaría “un panorama sumamente crítico”, ya que en estos parques se albergan diversos ecosistemas relevantes a nivel nacional e internacional, de acuerdo con los propios decretos emitidos en cada una de las 182 áreas naturales.

Por ello, los expertos en materia ambiental le dijeron a la Agencia Anadolu que, de llevarse a cabo esta medida presupuestaria, se estaría obstaculizando el cumplimiento de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP21), el llamado Acuerdo de París, el cual fue firmado en abril del 2016.

“Es un tratado obligatorio. México debe cumplir sus compromisos (…) Hace tres años debimos haber empezado a caminar: instalar plantas de producción de energía renovables o limpias para el tema de control de la emisión de gases de efecto invernadero para el 2024”, apunta Fueyo.

El “Convenio de la Diversidad Biológica”, cuyo objetivo es la conservación, el uso sostenible, así como la participación “justa y equitativa” de los beneficios producidos de los “recursos genéticos”, también estaría en peligro, ya que, tal como asegura Carabias, es mediante un manejo eficiente de las áreas naturales protegidas, como con el aumento de su superficie, que “se logra la representatividad de todos los ecosistemas naturales”.

“¡Todos los organismos que tienen que ver con biodiversidad (están) acorralados! ¿A qué escenario nos vamos a enfrentar? Se supone que en este año debería concluir el Convenio sobre Diversidad Biológica. Por la pandemia se postergará a 2021, y debemos asumir el nuevo Plan Estratégico”, detalla Fueyo.

Por otra parte, está la “Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible del Programa de Naciones Unidas”, aprobada en 2015, cuyos 17 objetivos globales son “erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad”. Estos involucran acción por el clima, vida submarina, ecosistemas terrestres, energía asequible y no contaminante; agua limpia y saneamiento, así como ciudades y comunidades sostenibles.

“México asumió un compromiso de protección de la naturaleza y parte de ese compromiso tiene que ver con la necesidad de conservar el sistema de áreas naturales protegidas; necesitamos honrar ese compromiso y en consecuencia hacernos cargo”, agrega el maestro Enrique Provencio, presidente de Ceiba.

Negociación incierta

Ha transcurrido un mes desde que los guardaparques fueron notificados del recorte. El Gobierno mexicano ha sostenido ante la prensa que el presidente está enterado de la importancia de la Conanp, por lo cual se iniciaron negociaciones con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

El secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Víctor Toledo, y el comisionado de la Conanp, Roberto Aviña, han confirmado que las pláticas para lograr un mayor presupuesto van por buen camino.

El pasado 17 de junio, el comisionado Aviña sostuvo un encuentro con senadores de la Comisión de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Cambio Climático. En la minuta, a la cual tuvo acceso la Agencia Anadolu, el comisionado Aviña aseguró que “ya se tienen respuestas favorables de la SHCP sobre el presupuesto para la Conanp, ya que solo les alcanza para julio hasta el momento, pero ya se autorizó presupuesto adicional para concluir el año”.

Entre las conclusiones de la reunión se fijó un acuerdo para concretar un encuentro entre las comisiones de Medio Ambiente y Presupuesto de la Cámara de Diputados con el fin de que se dé “seguimiento al tema del presupuesto del próximo ejercicio fiscal”.

Hasta ahora no se ha anunciado oficialmente ningún cambio. La página de “Salvemos Conanp” escribió: “Aun no hemos recibido ninguna información o respuesta oficial. Aún no cantamos victoria”.



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