Un edificio de operación y mantenimiento tan bello que no parece a otros de su tipo

El túnel de Eurasia (en turco, Avrasya Tüneli) es un túnel para vehículos rodados en Estambul que cruza por debajo del estrecho de Bósforo. El túnel fue abierto al tráfico el 22 de diciembre de 2016 y consta de dos pisos que conecta Kumkapı en la parte europea y Koşuyolu en la parte asiática con una ruta de 14,6 km. Este túnel cruza el Bósforo bajo el fondo marino a una profundidad máxima de -106 metros y se sitúa a un kilómetro al sur del túnel ferroviario submarino Marmaray. El viaje entre los dos continentes dura cerca de 5 minutos.

El Edificio de Operaciones y Mantenimiento es el centro neurálgico del túnel de Eurasia. GMW MIMARLIK, responsable de proyectos de transporte en todo el mundo, incluyendo varias terminales de aeropuertos internacionales y estaciones de tren fue el encargado de diseñar el edificio inaugurado en 2016.

El edificio alargado se sitúa por encima de las instalaciones de mantenimiento del nivel del suelo y marca la entrada del túnel desde el lado asiático. El objetivo del diseño fue crear un edificio contemporáneo con una expresión arquitectónica distintiva que no sólo cumpliese con los requisitos funcionales y técnicos exigidos sino que también respondiese a su contexto inmediato y simbolizase el nivel tecnológico más alto del túnel de Eurasia.

El programa principal se coloca en un único cuerpo alargado de dos niveles. Esto permite una simple distribución de pasillo en medio dejando ambas fachadas libres para las oficinas, salas de reunión, archivo, etc. En las plantas inferiores, que actúan como base, se sitúan otros servicios de reparación, almacenes y espacios técnicos.

Los contornos naturales del sitio se han mantenido como una colina ajardinada y los componentes de mantenimiento del edificio han sido parcialmente ocultados detrás de los contornos del terreno dejando la estructura de la oficina flotando libremente por encima.

La fachada de doble piel actúa como un elemento pasivo que aporta sombra y protege el interior del edificio del sol.

La piel externa formada por paneles de metal perforados tiene un sutil movimiento de onda y define el aspecto del edificio desde la distancia y desde su interior.  Esta separación entre ambas pieles permite también crear un pasillo técnico para la limpieza de los cristales a la vez que sirve para crear un túnel de aire que sirve como protección de la temperatura, del sol, del sonido y el polvo.

Esta piel exterior crea un símbolo brillante en la noche para ser visto por los coches que pasan a su lado o ingresan en el túnel. El hecho de que se sitúa junto a la carretera motiva que su visión siempre sea de pasada y por lo tanto su forma alargada y fachada abstracta refuerzan este carácter icónico del edificio.

(Fotos: GMW Mimarlık)

- Programa preparado por el arquitecto Santiago Brusadin -